miércoles, julio 25, 2007
ficción
un niño y su madre:-y si todos naciésemos con una bomba de relojería montada en el cuerpo?
-qué estás diciendo?. No digas tonterías.
-si. Yo creo en ello. Son bombas muy sofisticadas. Unas desarrollan una enfermedad y otras otra. algunas veces fallan y entonces morimos de viejos.
-pero, de dónde sacas estas tonterías?. Calla! y baja el tono que te escucha todo el autobús.
Así era, les estaba escuchando. Atentamente.
Les escuchaba mientras volvía del trabajo, cansado, a casa.
Esa conversación fué lo más interesante del día. Me hizo pensar.
No puedo decir que me ocurra todos los días.
Etiquetas: ficciones
Pues no le falta razón al chico. Algunos llevmaos una bomba de relojeái que se activa sin saberlo y te explota ne la cara cuando menos lo esperas.
es importante saber reconocer cuando está a punto de explotar esa bomba...
tal vez estemos a tiempo de cortar el cable rojo
Estilo James Bond que anteayer cortó el de la bomba nuclear...me gusta cortar cables rojos.
la verdad es q cortar cables rojos da subidón subidón!!
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